Seguimos esta semana con dos técnicas rápidas y
sencillas y de efectos asombrosos. Se adaptan a todo tipo de decoración y objetos, paredes, muebles, como siempre con la
imprimación adecuada a cada tipo de soporte. Las bolsas de plástico producen un
efecto menos delicado que los trapos, ya
que el plástico no absorbe tanta cantidad de pintura como el tejido.
Esta técnica se puede realizar
sobre una pared ya pintada, pero ten en cuenta que siempre es mejor trabajar
con una pintura plástica satinada de
base, ya que la pintura mate es demasiado absorbente. Los colores que podemos
elegir son ilimitados, pero la combinación más acertada es la capa superior o
veladura 2 o 3 tonos más oscura que la
inferior.
Cuando más gruesos sean los
trapos o bolsas más marcado será el dibujo obtenido. Lo más importante de esta
decoración es mantener siempre el mismo grosor de trapos o bolsas hasta haber
completado todo el trabajo. En ambas técnicas se van retirando parcialmente la
última capa de pintura o veladura sin seguir un orden concreto, pero manteniendo
siempre la misma presión de trabajo. Si se trabaja con un trapo o bolsa muy
apretado el resultado será un dibujo muy cerrado, mientras que si el trapo o la
bolsa está más suelto el dibujo quedara más abierto.
- Disuelve pintura plástica en agua
hasta que obtengas la consistencia de una crema ligera (también
se puede utilizar óleo para artista diluido con disolvente).
- Aplica
la pintura con una brocha en una zona de un metro cuadrado
aproximadamente. Con otra brocha seca golpea la pintura para difuminar las
rayas de la brocha.
- Mientras
la pintura está fresca aprieta un trapo
o bolsa y golpealo sobre la superficie. Ves
apretándolo y recolocandolo en diferentes ángulos a medida que trabajes procurando
formar un dibujo al azar, usando las partes limpias del trapo. Cuando este muy
sucio cámbialo por uno limpio.
- Ves
realizando el siguiente trozo de pared, cubriendo con la pintura una parte de
la pared ya trabajada, para asegurarte que no se vean las uniones.
- Si el drapeado queda poco uniforme o de aspecto manchado retocalo con un trapo limpio. Si la superficie se ha secado moja el trapo, escúrrelo y trabaja encima de la superficie punteada rellenando los espacios vacíos hasta que el efecto sea uniforme.
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